Desde este espacio se pretende oxigenar el ambiente de nuestra alma mater. Las preocupaciones de la Comunidad Universitaria afloraron como nunca en los últimos meses. La inconformidad de los estudiantes generó una inédita movilización estudiantil; el desconocimiento al personal administrativo y de operarios agotó la paciencia acumulada por muchos años, en espera de justas reivindicaciones; y aunque el estamento profesoral se encuentra fracturado, buena parte del cuerpo docente arrió las banderas del cambio. En este innegable escenario emergió la propuesta de una Universidad como bien común, en un momento excepcional que de manera convergente hemos llamado constituyente.

Todo el trabajo que pretende desarrollarse desde la Dirección Financiera y Administrativa, en sus diversas dependencias con su equipo de colaboradores, se apoya en las ideas rectoras del Rector Profesor Leopoldo Múnera, especialmente el eje de la propuesta Administración al servicio de la vida académica.

Nos parece que la rendición de cuentas ha sido insuficiente y la transparencia poco efectiva. La información que se mostraba a la Comunidad Universitaria, reflejo del desempeño institucional y de las decisiones en las instancias directivas, se caracterizaron por la incompletitud y/o la superficialidad. Atacaremos asertivamente estas debilidades mediante un proceso de doble vía: las dependencias de la Dirección Financiera Administrativa se acercarán a las unidades básicas de gestión (las mal llamadas empresas), para explicarles en forma oportuna y completa los insumos mínimos para sus correspondientes rendiciones de cuentas, incluyendo como novedad el instrumento de gestión para la toma de decisiones denominado Flujo de Efectivo. A su vez, las unidades básicas de gestión -facultades, por ejemplo- podrán permanentemente acudir a nuestras dependencias a comprender las cifras que arrojan los resultados de sus gestiones.

*Profesor Asociado Escuela de Administración y Contaduría Pública
Facultad de Ciencias Económicas